Tentaciones y Finanzas
Hoy les escribiré sobre tentaciones y finanzas. ¿Qué relación tienen? Vayamos por partes. Primero voy a confesar algo. Me encanta comer, probar comidas nuevas. Ese en sí no es un problema. Sin embargo, si delante mío tengo comida que me guste mucho, es muy probable que coma mucho más que lo que debiera. Lo peor de todo es que generalmente esa comida que me gusta mucho no es la mejor para mi salud: papas fritas, hamburguesas, empanadas, pizzas, etc.

Las tentaciones, lejos de mi alcance.
Por suerte mi esposa se encarga de llevar las riendas de la alimentación en casa y generalmente es ella quien se encarga de organizar nuestras comidas, pero cuando suelo ir yo al supermercado, si bien llevo una lista con las cosas que hay que comprar, tiendo a desviarme un poco y agregar alguna que otra cosita. Con el tiempo fui aprendiendo algunas técnicas de autocontrol y cuando voy al supermercado una técnica que suelo utilizar es directamente no comprar de mucho de esas cosas «no saludables » para no tenerlas al alcance de mi mano en casa y evitar así cualquier tipo de tentación.
Reducir las porciones.
Otra forma de evitar tentaciones es reducir porciones. Hace unos años cuando fui por primera vez a una nutricionista para ordenar un poco mi alimentación ella me recomendó bajar las porciones de lo que comía. Y funcionó. Aunque reconozco que me costó al principio, pude sentirme bien comiendo menos y fui notando mejoría con el tiempo. Lo que sucedía realmente es que si había sobre la mesa cuatro hamburguesas, me comía las cuatro. La tentación de verlas sobre la mesa era fuerte y terminaba comiéndolas aún sin hambre. Reducir las porciones fue mi solución.
Es el día de hoy que recuerdo cuando de pequeño mi madre hacía milanesas y nos preguntaba a mi y a mi hermano:
«Van a seguir comiendo?»
Y nuestra respuesta era: «Vas a seguir haciendo?»
Era simple: si ella hacía, nosotros comíamos. !!!La solución para ella era dejar de hacer tantas milanesas y racionar lo que comíamos!!!
Tentaciones y Finanzas
Por suerte todo esto no me sucede cuando organizo mis finanzas. Creo tener disciplina para llevarlas organizadamente. Están entrenadas desde hace años y generalmente puedo evitar muchas de las tentaciones que se me presentan porque puedo poner el objetivo de largo plazo (ahorro) por encima del de corto plazo (consumo) sin siquiera pensarlo.
Una ganga no es una ganga a menos que sea algo que necesites.
Sidney Carroll
Si bien reconozco que a veces también caigo en la tentación de comprar algo repentinamente, lo general es que pueda replantearme muchas veces la necesidad de comprarme algo y si realmente eso que voy a comprar va a tener la utilidad que las publicidades nos hacen creer que tienen. A veces ahorro sin un objetivo en particular, solo por la tranquilidad mental que eso me genera, pero en algún momento todo mi ahorro pasa a ser la base para encarar algún objetivo.
Como verás en muchas entradas del blog siempre hago hincapié en ahorrar primero y luego en separar el ahorro en algun lugar o cuenta que no esté tan a nuestro alcance. Es de ahorro y el ahorro, salvo emergencia, es intocable.
Todo esto tiene que ver con mis confesiones previas. Sacar el ahorro de tu vista, es evitar todas las tentaciones que se te presentan día a día, en la TV, redes sociales, vía pública o donde sea y que nos inducen a comprar todo lo que se nos ofrezca. Es generar esa carencia ficticia donde solo podrás gastar lo que queda en tu cuenta. Haz de cuenta que en resto no está. Es comida que no está servida.
Reducir las porciones es dejar en la cuenta solo aquello que podemos gastar y está dentro del presupuesto. Por ejemplo, puedes tener una cuenta general para todos tus gastos o bien separar una para gastos fijos (alquileres, internet, seguros, etc) y otras para cuentas de gastos varios. Ábrete una cuenta (aquí el link para una cuenta gratuita en N26), transfiere el dinero que has presupuestado para esos gastos variados y lleva sólo esa tarjeta de débito cuando salgas a comprar.
Como me sucedió a mi cuando fui a la nutricionista, al principio me costó. Incluso me hacia ruido la panza como si me quedara con hambre. Sentirás que te falta algo de dinero, pero no te preocupes, estarás ahorrando. Cuando te acostumbres a estas nuevas porciones significará que estás mejorando tu entrenamiento y podrás ver cómo tu ahorro ha comenzado a crecer.
Tentaciones y finanzas, ¿Cómo haces para equilibrarlas? Aguardo tus comentarios!
Abrazo!
